Con la llegada del invierno, muchas familias notan una gran bajada de las temperaturas dentro de la propia vivienda. ¡Qué desagradable estar en tu casa y sentir como si estuvieras en plena calle! ¿A ti también te pasa? ¡No te preocupes, es muy común! Te vamos a ayudar a reducir la pérdida de calor en tu casa, explicándote qué la provoca y cómo solucionarlo.
Hoy vamos a compartir contigo, varias formas para disminuir el frío y mantener tu casa calentita, sin necesidad de presupuestos gigantescos. Pero antes, conoce las principales razones por las que tu casa pierde calor y por qué es importante saber cuál es la eficiencia energética de tu vivienda y en qué influye. ¡Toma nota!
¿Qué provoca las pérdidas de calor?
Existen varias causas que generan pérdidas de calor en el hogar, y estas son las más comunes:
- Malos aislamientos o ausencia de los mismo
- Uso de materiales de baja calidad o en mal estado
- Uso de materiales de baja calidad o en mal estado
- Pérdidas por ventanas y puertas no aislantes
- Casas demasiado antiguas
- Falta de sistemas de climatización de eficiencia energética
No sólo la pérdida de calor es el problema de las casas en temporadas de invierno, sino también la humedad que se origina producto de la falta de calor.
Muchas casas construidas antes de 1980, tienen problemas de pérdida de calor, o exceso de frío, porque carecen de las condiciones apropiadas para mantener a una familia segura de los cambios de temperatura que tiene cada estación climática.
Un ejemplo claro de fugas de calor, son las conductividades y espesor de los materiales con los que está construida la estructura de la vivienda. A esto se le conoce como puentes térmicos, que son áreas de la casa donde el material o las condiciones no son favorables y hacen que no se mantenga el calor en las épocas de invierno, y al contrario en verano.
Las ventanas y puertas son los principales puentes térmicos por donde se escapa el calor. Por otro lado, los techos, paredes y muros, también pueden ser conductores que transmiten el calor hacia afuera, dejando el hogar con poca o ninguna sensación de calefacción.
¿Es importante conocer la eficiencia energética de mi casa?
Saber la eficiencia energética de tu casa es fundamental para contrarrestar los efectos causados por los cambios climáticos de cada temporada. El certificado energético, determina el grado de pérdida de calor que tiene tu hogar, y si se necesita, o no, una reforma de aislamiento. Sólo entonces, podrás conocer qué sistema de calefacción necesitarás.
Por ejemplo, cuando la pérdida de calor es baja o mínima, una calefacción con radiadores de baja temperatura o instalación de fancoils por aerotermia, será suficiente. Las pérdidas de calor mínimas, representan un problema térmico menor.
La pérdida de calor alta, es más grave. No es el fin del mundo, pero deberás buscar soluciones más apropiadas, como una reforma que incluya materiales aislantes y la instalación de suelo radiante por geotermia o aerotermia. Una forma ecológica de mantener eficientemente el ambiente de tu hogar en óptima temperatura todo el año.
Estos son los resultados que se pueden obtener tras calcular la pérdida de calor de una vivienda:
- Clasificación A,B y C (pérdidas o necesidades de calor bajas)
- Clasificación D (pérdidas de calor moderadas)
- Clasificación E,F y G (pérdidas de calor altas)
Para los últimos dos casos, es necesaria la instalación de un aislamiento térmico adicional del sistema de calefacción.
La mejor manera de reducir la pérdida de calor en tu casa
Hay muchos métodos prácticos para reducir la pérdida de calor y corregir el problema de raíz. Si bien es cierto que las viviendas antiguas son las más desfavorecidas, también existen remedios para ellas. A continuación, te mostramos dos posibles soluciones muy eficientes.
Haz reformas y coloca materiales aislantes
Aislar tu casa sin obras es posible cuando las correcciones que se ameritan son pocas, en algunos casos bastará con hacer algunas pequeñas reformas. Asimismo, dependiendo de tu economía o del estado del inmueble, quizás sí se pueda contemplar hacer obras más grandes.
La cuestión es, contar con materiales aislantes en tu vivienda, por eso, si necesitas hacer reformas para reducir la pérdida de calor, estas son las más habituales:
- Poner algún tipo de aislante térmico en el suelo, entre el subsuelo y la superficie o poniendo una tarima flotante de madera.
- Aislamiento de paredes, es decir, poner un material aislante en paredes huecas, entre el ladrillo y la pared interior.
- Reformar el techo, se coloca un aislamiento y se hace una revisión para tapar los huecos resultantes de tuberías y conexiones de electricidad. Los techos que pierden más calor, son aquellos que no tienen una vivienda encima, como los áticos.
- Cambiar ventanas, o bien sustituyéndolas totalmente, o colocando un triple acristalamiento.
- Sustitución de puertas, se cambian las puertas exteriores de la entrada, balcón, patio, etc., e interiores en mal estado, por otras más eficientes. O, simplemente, se colocan burletes nuevos alrededor de ellas.
Estas pequeñas reformas, trae una serie de beneficios por sí solas, menos sensación de frío, mejor aislamiento acústico, menos humedades y mayor eficiencia a la hora de usar la calefacción, de hecho, puede que no haga ni falta ponerla.
¡Renuévate! Utiliza sistemas de eficiencia energética
Cambiar tu vieja calefacción por sistemas de climatización con energía renovable, es una gran idea, un ejemplo sería la calefacción por suelo radiante. Estos sistemas son eficientes, sostenibles y muy rentables porque utilizan energías naturales, reducen la huella de carbono y consumen muy poco.
Una excelente opción son las instalaciones con aerotermiapara climatizar tu casa, que sirve para la calefacción, agua caliente sanitaria, bombas de calor para piscinas y aire acondicionado en la época de verano.
Otra alternativa es la instalación por geotermia, cuyo proceso puede generar calor y revertirse en verano, haciendo que el calor excesivo de la vivienda salga y se produzca refrigeración.
Por último, y no por ello menos importante, es lainstalación de energía solar fotovoltaica. Es un sistema de autoconsumo que permite ahorrar energía eléctrica, ya que se autoabastece gracias a la radiación solar, y sirve para generar agua caliente y producir electricidad.
Todos estos sistemas de eficiencia energética, son la mejor manera de mantener una temperatura ambiente ideal, según la temporada, creando una agradable sensación de confort y bienestar en tu hogar.
Y por si no lo sabías, en la Comunidad de Madrid, y otras zonas de España, ¡existen programas de ayudas y subvenciones de energías renovables de autoconsumo para facilitarte su instalación!
Consejos útiles para evitar la pérdida de calor
Finalmente, además de las posibles reformas, puedes preparar tu casa para el frío y reducir la pérdida de calor tú mismo con algunos trucos sencillos y útiles como estos:
- Sella bien tus ventanas
- Bloquea la entrada de aire por tus puertas
- Conserva el calor usando cortinas gruesas o térmicas
- Coloca mantas térmicas o de material apropiado para el frío en la cama y el sofá
- Usa cojines con telas calentitas que permitan mantener el calor
- Aprovecha las horas del sol para subir las persianas, y bajarlas cuando oscurezca
¡No esperes más, y ponte en marcha antes de que llegue el frío! Obtén el certificado energético de tu vivienda y averigua qué necesitas cambiar para, de una vez por todas, reducir la pérdida de calor y sentirte bien en casa.
Pregúntanos, en Energeo tenemos un equipo especializado que sabe lo que necesitas.